El cobre es un elemento químico importante para el cuerpo humano porque desempeña varias funciones esenciales en el organismo. A continuación, se destacan algunas de las razones por las cuales el cobre es necesario para la salud:
- Metabolismo del hierro: El cobre es esencial para la absorción y el metabolismo del hierro en el cuerpo. Ayuda a convertir el hierro no absorbible en una forma que el cuerpo puede utilizar para producir hemoglobina, la proteína en los glóbulos rojos que transporta oxígeno por todo el cuerpo.
- Formación de tejido conectivo: El cobre es necesario para la formación del colágeno, una proteína estructural clave en el cuerpo que se encuentra en la piel, los huesos, los tendones y otros tejidos conectivos.
- Función del sistema nervioso: El cobre desempeña un papel en el funcionamiento del sistema nervioso, incluyendo la síntesis de neurotransmisores que transmiten señales entre las células nerviosas.
- Función inmunológica: El cobre es importante para el funcionamiento adecuado del sistema inmunológico, ayudando en la producción de células inmunitarias y en la respuesta a las infecciones.
- Pigmentación de la piel y el cabello: La tirosinasa, una enzima que contiene cobre, es esencial para la producción de melanina, el pigmento que da color a la piel, el cabello y los ojos.
- Antioxidante: El cobre actúa como cofactor en enzimas antioxidantes, como la superóxido dismutasa, que ayudan a proteger las células del daño causado por los radicales libres y el estrés oxidativo.
Aunque el cobre es esencial para la salud, es importante consumirlo en cantidades adecuadas, ya que un exceso de cobre puede ser perjudicial para el organismo. La deficiencia de cobre es rara en la dieta occidental, ya que se encuentra en una variedad de alimentos, como nueces, legumbres, hígado, mariscos y granos enteros. La cantidad diaria recomendada de cobre varía según la edad y el sexo, pero generalmente se encuentra en un rango de 0.9 a 1.3 miligramos al día para adultos.